Aprendí a escribir cuando iba a párvulos... me dieron mi primer lápiz de minas y un cuaderno Rubio titulado Escritura vertical.
Todo eran palitos y redondas que se unían de forma curiosa.
Pasados unos años he de aprender otro tipo de escritura, en la que el cuaderno es un blog, el lápiz son mis dedos y las páginas no pasan en horizontal, sino en vertical...



domingo, 29 de noviembre de 2009

... el somni de la petita Efwa

ayer recibí dos regalos de parte de una persona que acababa de conocer... el primero -y no por ello más importante- fue decirme con una gran sonrisa y una mirada sincera, que le encantaba mi blog... el segundo fue el cuento El somni de la petita Efwa (también editado en castellano por ING Edicions) escrito por Àngels Consuegra y con ilustraciones de M.Carmen Fortuño (la persona que me lo regaló)...

... las ilustraciones son como pequeñas obras de arte... llenan de color una historia -a priori- triste...

... la autora del cuento, tras un trágico acontecimiento en su vida, decide irse como voluntaria a un pequeño orfanato de África... allí trabaja con niños que sufren parálisis cerebral, como la pequeña Efwa... fruto de esta experiencia, nació este cuento, cuyos beneficios son para ayudar a este pequeño orfanato y otros proyectos solidarios relacionados con la infancia... tenía los ojos llorosos mientras lo leía... lo he hecho en voz alta, como si se lo contara a alguien... me ha emocionado ver cómo se puede enternecer una tan cruda realidad... he llorado cuando he sido consciente de que los más desfavorecidos se ilusionan con pequeñas cosas... y no lloraba por ellos... sino por mi... por ver cómo hay tantas cosas cotidianas que a ellos emocionan y a nosotros nos pasan desapercibidas... Efwa sonríe al ver una mariposa revolotear a su alrededor... se ríe sin parar cuando se escurre la pastilla de jabón, como si fuese un pececito, dentro del barreño donde cada día la baña su madre...

gracias, M.Carmen por este regalo... gracias, Àngels, por compartir con nosotros tu experiencia...

en cuanto Noa tenga edad para entenderlo, se lo contaré una y otra vez... le enseñaré los dibujos, le explicaré la historia... y le ayudaré a disfrutar de las cosas cotidianas y que sepa lo afortunada que es... yo aún lo he de aprender...


sábado, 28 de noviembre de 2009

cuidado con lo que deseas porque puede hacerse realidad...

hace unos meses, le estaba llorando a mi amiga Mª José con un problema existencial... estaba a punto de ser madre y, como si volviera a ser una niña, debía decidir qué quería ser de mayor... le decía que en el fondo mi vida tendría que haber sido más hippy...

había estado en Ibiza la semana anterior y me había perdido -un día tras otro- por los mercadillos hippies... yo quería vender espejitos pintados a mano de flores naranjas y verdes!!... y le dije: si no puede ser en el Mercat Las Dalias de Ibiza, también sería feliz vendiendo espejitos en los mercadillos que montan algunos sábados y domingos en la Plaza Sarrià...

seis meses más tarde aquí estoy... , participando como vendedora en el Mercat Boig que han organizado en la Plaza Sarrià... lo cierto es que la parada es de Las Cosaderas, pero me ha dejado incluir entres sus preciosos anillos, pulseras, monederos... un par de cuadros y un espejito lleno de flores color naranja y verde... deseo cumplido...

ahora quiero...

miércoles, 11 de noviembre de 2009

el camino equivocado...

son las dos y media de la tarde... vamos por la carretera y vemos un cartel rojo que nos indica que hay un restaurante con vistas panorámicas... seguimos el camino... tiene una vista privilegiada de todo el valle... el día es tan claro que hasta se ve el mar... somos cuatro y el restaurante, no muy grande, no tiene todas las mesas ocupadas... vemos una al fondo, al lado de la chimenea encendida, que es ideal para calentarnos tras el paseo a 10ºC que hemos hecho durante toda la mañana... mmm... huele a carne a la brasa... preguntamos si tienen mesa libre para comer... nos atiende la dueña del local... si, esperen un momento, cuántos son?... 4 personas... perfecto!... ah y un cochecito... no, entonces no... cómo que no?... no, es que no cabrían... pero si es un cochecito muy pequeño, cabe en cualquier lado... no, no, es que no cabe... de verdad, que por lo que veo, cabe perfectamente... no, no... además no tienen reserva... tras insistir un rato -como he dicho ya eran las dos y media y el restaurante más cercano estaba a más de media hora...- la antipática dueña del local, nos responde de mala gana con un bueno, esperen, miraremos a ver qué podemos hacer...

al cabo de un cuarto de hora volvemos a preguntar... fuera hacía frío y cada vez resultaría más complicado encontrar un sitio donde comer... no, es que no lo sé, porque hay reservas... no tienen reserva?... no, es que es la primera vez que venimos, no conocíamos el restaurante... bueno, no sé... por favor, nos pueden indicar si nos darán de comer a una hora decente o ya tiene claro que no? más que nada para saber a qué atenernos... grrr... esperen un momento...

diez minutos más tarde, tras ver atónitos como reñía a un niño -no era su hijo sino el de una clienta- que jugaba en el jardín y oirle decirle a una pareja que no le quería calentar los potitos de sus hijos en el microondas, la antipática y borde dueña del local nos indica que podemos pasar... nos cede la mesa del fondo, la que -en secreto- queríamos nosotros... de repente... veis qué bien?... tenéis la mejor mesa... es que al final todo se puede arreglar... la antipática, borde e hipócrita dueña del local nos hace un rato la pelota...

no llevamos ni cinco minutos sentados y nos viene la antipática, borde, hipócrita y corta dueña del local y nos dice que si nos podemos levantar, que ha llegado la reserva que tenían para esta mesa... son unos clientes "vip" que siempre piden esa mesa... nuestra cara de póquer hace que los clientes super vips les digan que da igual, que ya se sientan ellos en otra mesa -igual de acogedora, igual de grande...- que no hace falta que nos levantemos... les damos las gracias y de repente, la antipática, borde, hipócrita, corta y loca dueña del local, se esfuerza durante toda la comida para que estemos a gusto... viene cada cinco minutos a la mesa para preguntarnos si está todo bien... que si el niño (Noa a sus ojos es un machote) está calentito y tranquilo... nos cuenta que ella es enfermera de quirófano y su marido abogado... que no son restauradores -ya se nota-... que ella compra, cocina, sirve, vende... vale, pero, por favor, nos puede traer a mi marido y a mi las costillas de cordero, que nuestra pareja de amigos ya se las han terminado y nos apetecería, en la medida de lo posible, poder comer juntos el postre?... vienen tres personas diferentes a tomarnos nota de la bebida... y otras tantas cuando llega el momento de pedir los cafés... la cuenta -que hemos mirado con lupa- solo ha sumado un refresco de más -raro teniendo en cuenta que, según todas las veces que han venido a tomarnos nota, sumaríamos dieciocho cervezas, siete aguas, doce cocacolas y nueve cafés-...

los rovellons, alcachofas y caracoles que pedimos como entrantes estaban buenos... las costillas de cordero a la brasa -aún comiéndolas en dos turnos- deliciosas... el lugar era acogedor... las vistas excepcionales... pero no volveremos... con lo fácil que es decir las cosas bien de entrada... el restaurante?... pues sí, por qué no decirlo?... Masia Can Carbonell, en la carretera de Sant Celoni a Santa Fe del Montseny... un cartel rojo en el lado izquierdo de la carretera os indicará el camino... el camino que no debéis seguir...

martes, 10 de noviembre de 2009

... tres de cada cuatro pagan en efectivo

este vestido que está mirando sienta muy bien... y solo queda uno... por qué no se lo lleva a casa y se lo prueba con las medias adecuadas, con algún pañuelo que tenga...?... si no le convence, puede venir y cambiarlo por otra cosa... no, no devolvemos el dinero... pero le podemos hacer un vale que no caduca... piense que cada semana entran prendas nuevas... además, con las navidades a la vuelta de la esquina seguro que encuentra algo para usted o para regalar... por cierto, el fular que tenemos en el escaparate combina ideal con este vestido... mire, salgamos un momentito fuera para verlo bien a la luz del día... y luego lo puede aprovechar con un tejano y una camisa y dar un toque divertido... es uno de esos complementos que casan muy bien con diferentes prendas... lo dicho -metiendo vestido y fular dentro de una bolsa- pruébeselo tranquilamente en casa y si no le acaba de convencer, viene sin ningún compromiso y lo cambiamos por otra cosa... pagará en efectivo o con tarjeta?....

lunes, 2 de noviembre de 2009

... un día como tantos otros?

café con hielo en la terraza... un cigarro... el sol me impide abrir más los ojos... da igual, los mantendré cerrados... así puedo pensar... parece un día como tantos otros... pero no lo es... hoy empiezo un nuevo trabajo... en el ipod suena una canción que me recuerda una época muy buena de mi vida... hoy empieza una nueva época... será buena?... la música me dice que si...